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7mo Reporte del Cultivo de Maní al 1 de junio de 2023

7mo Reporte del Cultivo de Maní al 1 de junio de 2023

7mo Reporte del Cultivo de Maní al 4 de marzo de 2023


Visión General del 7mo Reporte del Cultivo

La situación actual de los maníes es muy variada de acuerdo con la zona geográfica en la que se encuentren. El estado general de la cosecha de maní se ubica en un rango de regular a bueno para la mayoría de la superficie sembrada. El cultivo de maní sigue acusando las mayores mermas en producción respecto al ciclo anterior, debido a la sequía acontecida durante toda la temporada primavera-estival.

A la fecha de elaboración del presente reporte, el progreso del arrancado-invertido se encuentra alrededor del 96% del área total sembrada.

Peanut photo in the 4th report of peanut cultivation

Con un avance de cosecha del 38%, se estima una reducción del 30-32% en el rendimiento en caja comparado con el año anterior, posicionándose en un valor promedio de 2-2,2 Tn/ha para la zona manisera, que comprende a las provincias de: Córdoba (90%), La Pampa (7%) y Buenos Aires (3%).

Con respecto a la producción en los campos, la expectativa de obtener altos rendimientos fue disminuyendo paulatinamente. A medida que se fue profundizando la sequía padecida en los meses de enero, febrero y marzo, muchas vainas han abortado el grano o directamente no lo han formado.

Independientemente del volumen de pérdidas acontecidas, la mayor preocupación hoy es por la calidad de los maníes, ya sea por la mayor cantidad de cuerpos extraños recibidos con el farmerstock (el productor trata de no perder granos por lo que regula la cosechadora para “cargar” todo), como por los daños físicos.

En cuanto a los calibres de maní recibidos, hasta el momento, hemos detectado una menor cantidad de granos grandes (30/38-38/42), teniendo en cuenta las condiciones de sequía y calores extremos que pasaron.

Dentro de las zonas más afectadas en cuanto a calidad y bajos rendimientos, encontramos a la provincia de Córdoba, siendo el departamento Juárez Celman el más comprometido, seguido por los departamentos de Río Cuarto y Tercero Arriba. La zona Norte también fue muy golpeada por la sequía, por lo que los rendimientos caerán por debajo de la media.

Como resultado de las consideraciones señaladas anteriormente, y de acuerdo con el relevamiento realizado lote por lote, estimamos hoy en día un rendimiento promedio de 2-2,2 Tn/ha (base maní en cáscara seco y limpio).

En comparación con el estado de la cosecha de maní del último reporte, la situación ha desmejorado.
La condición actual del cultivo, según nuestro relevamiento, es la siguiente:

La comparación con el relevamiento detallado en el último reporte muestra el deterioro en la condición general del cultivo en el último mes:

Las lluvias recibidas en la semana del 21 al 27 de mayo, habían generado una suspensión en todas las actividades de cosecha en las diferentes zonas. Entrando en la última semana de mayo, las condiciones meteorológicas mejoraron y se pudo retornar a las actividades de trilla en todas las zonas.

Nuestro mapa de referencia de zonas productivas de maní

Las principales zonas de maní en Argentina incluyen las provincias de Córdoba, La Pampa, San Luis y Buenos Aires.

División del área principal de maní en Argentina

Tareas proyectadas a campo

Como ya se mencionó anteriormente, hoy en día, las tareas de arrancado-invertido se encuentran en un 96% de avance respecto del total de hectáreas sembradas. En términos generales, dicha labor fue más lenta que otros años ya que los maníes se encontraban inmaduros (menos del 50% de madurez) por lo que se decidió esperar el máximo de días para tratar de llegar al porcentaje deseado de madurez. Esta inmadurez es ocasionada en gran medida por la sequía atravesada durante todo el ciclo del cultivo. A su vez, agravada por la helada ocurrida el 18 de febrero.

En cuanto a las actividades de cosecha, estimamos que el avance es del 32%, habiéndose retomado las tareas de cosecha.

Durante la primer y tercera semana de mayo se desató un temporal de vientos con ráfagas de más de 80 km/hs que desparramaron las hileras de la producción de maní, quedando amontonado en los alambrados y las plantas dispersas en el lote que tuvieron que ser acomodadas en partes a mano. Esto dificulta la cosecha ya que las máquinas pisan las hileras que están desacomodadas. Las pérdidas ocasionadas fueron importantes, difíciles de calcular, porque las vainas se encuentran desprendidas de las plantas. Las zonas afectadas por este temporal fueron: la zona sur (Huinca Renancó, Ranqueles, Pincen, Vicuña Mackenna) y la zona norte (Lozada y Río Segundo).

Zona sur – Huinca Renancó
Zona sur –Ranqueles
Zona norte – Lozada
Zona norte – Río Segundo

Apreciaciones Finales

A medida que nos centramos a las tareas de arrancado y cosecha, que son los últimos escalones críticos en el ciclo del maní, es fundamental que las condiciones del tiempo sean soleadas y sin lluvias, ya que de esta manera se está asegurando un buen avance y sin contratiempos.

El cultivo de maní sigue siendo un proyecto regular en cuanto a rendimientos, aunque la situación de éstos puede describirse con mayor precisión como heterogénea, ya que en una misma zona podemos encontrar lotes de maní con altos y bajos rendimientos por hectáreas. Esta gran heterogeneidad es originada por la variabilidad climática que tuvimos en el trascurso de desarrollo del cultivo.

Luego de lo descripto anteriormente, podemos estimar que los rendimientos promedios se ubicaran entre los 2-2.2 Tn/ha, muy por detrás de la última (2021-2022) y anterior cosecha (2020-2021).

Debemos tener en cuenta que los vientos ocurridos días atrás han ocasionado pérdidas irreparables que todavía no podemos cuantificar cuál será la merma real en kg/ha, ya que las vainas se encuentran desprendidas de las plantas y se encuentran desparramadas en el suelo e imposibles de ser cosechadas.

No cabe duda de que se trata de un año muy complicado para el sector manisero argentino; productores de muchas zonas tendrán rendimientos muy por debajo de su rinde de indiferencia por lo que ven difícil poder encarar una nueva campaña de maní.

Las próximas semanas serán claves para definir los resultados finales de la cosecha 2023 en Argentina, tanto en materia de rendimientos como de calidad. El cultivo está en la “recta final”, por lo que será indispensable prestar especial atención en las tareas finales (cosecha) que demanda el cultivo.

Hoy estamos un escenario de mucha incertidumbre que complica la toma de decisiones comerciales. Sólo el avance constante de la cosecha irá develando cuáles serán los resultados finales, y consecuentemente cuál será la oferta de Argentina para los distintos mercados. Desde ya, con lo sucedido hasta el presente, sabemos que las exportaciones disminuirán significativamente con respecto al año pasado; lo difícil de saber es cuánto menos tendremos para ofrecer.

Es fundamental que continúen las buenas condiciones meteorológicas en las próximas semanas, de manera de no incurrir en mayores pérdidas a campo y de poder recibir maní en cáscara en las plantas acopiadoras con niveles de humedad aceptables.

Imágenes del cultivo en las diferentes zonas productivas recolectadas para el 7mo Reporte del Cultivo


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